Sobre el humor

El premio de hacer reír

descarga_1_10.jpegCuando decimos que no hay mejor premio que recibir una sonrisa o una risa de alguien (sobre todo de un niño), no es una mentira, no es pose. Cuando se nos acercaba la gente en Cuba después de una función de nuestro grupo La Seña del Humor y nos agradecía por la risa que le sacamos esa noche, en medio de las dificultades del país, no tenía precio. Cuando un alumno, un padre o un profe me cuenta que rieron con mis libros, eso tiene un valor que nadie se imagina. Cuando alguien se ríe de mis artículos, fotomontajes, etc., me están premiando y muchos no saben lo feliz que me hacen.

Cómo crear un sketch

Tcomo-hacer-un-sketch-humoristico.jpgítulo engañoso. Lo advierto aquí por si no desea continuar leyendo. Porque no busque en este texto la fórmula mágica para crear un sketch. Yo solo quiero transmitirle lo que pensé y sentí al crear el primer sketch mío. Ojalá le sirva esta reflexión.

En enero de 1984, el día de la celebración del primer año de nuestro grupo de humor literario y gráfico “Tubería de Media Pulgada”, decidimos juntarnos las agrupaciones escénicas profesionales de la ciudad de Matanzas, Cuba: “El Teatro Mirón Cubano” y “El Grupo Dramático de Radio 26”, más el colectivo de humor gráfico “La Colmena” y nosotros.

De esa unión nació “La Seña del Humor de Matanzas”. Entonces se programó la primera actividad escénica púbica, donde todos actuaríamos, incluyendo los dos grupos literarios y gráficos.

Lo ridículo

Udescarga_8.jpegn gran amigo llega a mi casa y entrando me dice: “por favor, dame un vaso de agua, compadre”. Y yo le respondo: “no seas ridículo, tu tienes confienza aquí, así que ve a la cocina y sírvete tú mismo”… ¿Hizo el ridículo? No, como categoria dentro del estudio del humor, no; pero popularmente sí, porque se dice así y así se seguirá diciendo.

Otro amigo se me acerca y me comenta: “el sueldo de los maestros en este país es ridículo”… Esta es otra acepción de la palabra ridículo, pero tampoco nos interesa ahora para esta reflexión. Popularmente se dice así y así se continuará diciendo.

A un tercer amigo le hice una broma que no le gustó y me dijo: “me ridiculizaste delante de todos”… Como verbo tampoco nos interesa en este análisis, pero sin dudas, popularmente se dice así y así se va a seguir diciéndose.

Humor: ¿por dentro o por fuera?

descarga_2_6.jpeg¿Qué será más importante y necesario: una caricatura fea, con una línea mediocre, con un estilo bien comercial, de mal gusto, pero con un mensaje potente; es decir, con un contenido de peso, que haga pensar, o una caricatura preciosa, impecable en su línea, composición, textura, etc., pero su contenido sea de humor blanco?

¿Qué será más importante y necesario: que alguien se suba a un escenario sin tener vis cómica, sin saber nada del lenguaje actoral, del lenguaje escénico, incluso usando palabras obscenas, pero dice cosas potentes, expresa un mensaje con un contenido de peso, que haga pensar, o una presentación escénica de alguien con vis cómica, con dominio de los lenguajes actorales y teatrales, con ingenioso guión, pero solo con el objetivo de hacer humor blanco?

Un con-sentido del humor

pepe-pelayo.jpgEsta es una experiencia personal. La formación del mi sentido del humor.

El objetivo de redactar estas líneas es provocarle a usted una reflexión sobre este asunto. Hacerle recordar sus vivencias al respecto. Todo para remarcar la importancia que tiene apoyar la formación del sentido del humor en nuestros niños. Y pensar qué hacemos mal o bien. Quizás sin querer estamos reprimiendo su desarrollo. Pero sobre todo qué podemos hacer, repito, para facilitar su formación.

Este es mi caso.

No habré sido un niño carismático, pero sí asmático desde mi primer año de edad. Razón para tener una madre sobreprotectora, la cual me obligaba a jugar la mayor parte del tiempo en casa, porque en la calle, en los parques y plazas corría, transpiraba y entonces se me secaba la ropa encima, llegando la tos y faltándome el aire de inmediato. Eso, más la vocación de maestra y formadora de mi hermana -quince años mayor que yo-, facilitó mucho mi acercamiento a los libros y la lectura.

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