PP Layo, corre pon sal voluntario No. 10
La pregunta y la respuesta que encabeza esta noticia, es parte de la entrevista que le hice al Presidente de Chile, el Sr. Sebastián Piñera, cuando realizaba esta nota en Santiago. El resto de la entrevista la encontrará en este mismo blog, cuando venza mi autocensura. Gracias.
Visité Chile para reportear las frecuentes marchas de protestas que se están produciendo. Me salieron ampollas en los pies de tantas marchas que vi por televisión, acostado en mi habitación del hotel. Desde ahí, por teléfono, pude entrevistar al Presidente. “Son tantas las protestas de los jóvenes –me dijo-, que tendré que quitarle la Patria Protestad a los padres de esos estudiantes”. Cuando escuché esa amenaza, me lancé a la calle para entender mejor las marchas.
Lo primero que me sorprendió fue la figura de la líder de los estudiantes. Por supuesto, su nombre es Camila, porque se pasa el día camilando al frente de las marchas. Camila tiene muchos babosos detrás de ella, que se disputan seguirla, deseosos de abrazar sus pensmaientos y compenetrarse bien con ella. Pero Camila los para, con una cortina de hierro, con un muro de Berlín. Unos basan sus ideas sobre Camila, en que su cara vende, y otros en que vende muy cara.
Ella es miembro del Partido Comunista. Obvio, de ahí su natural predilección por las marchas. Como sabemos en el siglo XX fue el dirigente comunista francés George Marchais el que le dio auge a las marchas, como lo indica su apellido.
Muchas marchas terminan con desmanes, saqueos y destrozos hechos por encapuchados. Averigüé y me dijeron mis fuentes que son infiltrados de la policía que provocan eso para ensuciar las protestas. Dicen que se han profesionalizados tanto los infiltrados, que en cualquier momento hasta podrían ser escogidos por los estudiantes para ser los voceros de las protestas. Otras fuentes aseguran que los encapuchados son miembros de grupos violentistas de la extrema izquierda que vienen de los años sesenta. Lo afirman porque los han visto gritar, en estas jornadas, frente a la Embajada de E.U., lemas como: “Yankee go home”, “Libertad para Angela Davis, Nelson Mandela”, etc.
Algo saludable: “Somos los ingleses de América”, se burlan muchos chilenos de ellos mismos, al ver las marchas de protestas de Londres. Como no sabía mucho al respecto, vi los noticieros y me enteré de lo que ocurre allá y vi con estupor cómo los ingleses pasaron rápido de la Marcha nupcial de la Realeza, a la Realidad de las Marchas. Y vi cómo el Presidente Cameron amenaza con aplicar mano dura. Dice que con él no va eso de “Cameron que se duerme…”
En las noticias también vi que en España sucede algo parecido: la gente marcha y marcha. Imagínense, con tantas suelas gastadas ya Zapatero no sabe cómo remendar, perdón, cómo remediar la situación.
También están las marchas en Siria. Las revueltas en todo el país, incluyendo Damasco. Llamada “Da más asco”, por la tozudez de su Presidente afferado al poder.
Y qué decir de las marchas en Israel. Desde que Moisés guió la marcha desde Egipto abriendo el mar, no se habían reportando unas marchas judías "abriendo el mal", como las catalogó Netanyahu o Netanyahooo (no recuerdo cómo se escribe).
¿Qué mensaje me deja todo esto?, me pregunté al terminar de ver las noticias. Y llegué a la conclusión que las marchas están de moda. ¿Será porque las redes sociales hacen que se organicen más fácil que antes? Quizás, pero lo único concreto es que el concepto “marcha” se ha puesto en marcha "a toda marcha "y "sobre la marcha" se irá viendo si será una "marcha forzada" y sin "marcha atrás".
¡Pero que se marche pacíficamente por ideales nobles y justos!
¡Las marchas violentas y manipuladas políticamente que se marchiten!
PP Layo
Corre pon sal
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