Hoy está de cumpleaños una persona muy especial. Hace años lo conocí en las redes y enseguida empecé a admirar su trabajo, por sus decenas de libros publicados, por su enorme cantidad de curatorías de importantes exposiciones de humor gráfico, por la profundidad de sus artículos y análisis, por ser investigador, estudioso y promotor del humor, por su trabajo responsable y profesional al estar dirigiendo una Bienal Internacional de humor por tantos años. Y todo eso ¡mientras recibía su sueldo como cantante lírico! En fin, un extraordinario portugués todoterreno llamado Osvaldo Macedo de Sousa.
Un día, estando en Vigo, España, decidimos ir en familia a conocer Oporto en auto. Logré convencerlos de pasar una noche en Vila Real, porque sabía que Osvaldo inauguraba una exposición de caricaturas en esa ciudad esa tarde y quería conocerlo personalmente. Así fue.
Ahí pasamos de la amistad virtual a la amistad de piel.