Pelayaserías - Blog de Pepe Pelayo
Entre vista y oído No. 2
Entre vista y oído No. 1
No. 130
Ella obedece en todo a su cura. Por eso siempre va los domingos a escuchar sumisa
No. 197
A los que defienden religiosamente la ecología,
¿se les puede llamar ecoménicos?
Salir del closet


Líderes del transporte público


Dictaduras


Cine qua non No. 6
Carla Isaura y Buñuelo en... "¡MATRIX HAY UNA SOLA!"
-¡Vieja! ¡Mira quién vino a ver la película con nosotros!
-¡Hola, Berdulanga! ¡Tanto tiempo!
-¿Qué tal, Carla Isaura? Tu Buñuelo me convenció de venir a ver esa película.
-Hicistes bien.
-¿Por qué no traes unas palomitas de maíz para picar algo, Carla Isaura?
-Claro que sí, Buñuelo, pero no empiecen sin mí.
-Por supuesto que no. Bueno, ¿y tú, Berdulanga, has podido colarte en el cine?
-No, la cosa está dura en este país, Buñuelo. Hay pocas posibilidades y todo el dinero que se consigue se lo llevan “las vacas sagradas”.
-Es cierto. Carla Isaura y yo hemos intentado varias veces y aunque tenemos ideas buenas, siempre chocamos con ese muro.
-Ya estoy aquí, muchachos. ¡A comer popcorn, como dicen los gringos!
-Ya, ahí empezó la peli…Ya yo la vi el otro día.
-¡Pero no me dijiste nada, Buñuelo, hubiera sacado otra!
-No, Carla Isaura, porque quería que vieras esa por el éxito que tiene y para que la compares con la idea que tengo para una película fuera de serie.
-¿De verdad, Buñuelo?
-Sí, Berdulanga. Miren, ahora en esta parte, le dicen que es el elegido, pero él no lo cree.
-Cálmate, Buñuelo, Si viste la película, quédate callado y no cuentes nada. ¿Está bien?
-Está bien, Carla Isaura, no voy a decir nada... Pero sí les contaré de mi idea para un argumento... ¡Esa parte está buena! ¡Miren lo que hacen ahora el negro y la muchacha!... Les diré algo: lo que se me ocurrió fue una historia cómica, de humor negro...
-Me gusta esa onda de estar vestidos de negro, con capas largas y con lentes oscuros, ¿Eh, Berdulanga?
-¡Sí, Carla Isaura! ¡Pero no hablen más! ¡Vamos a ver esto!
-Miren, estuve pensando y me di cuenta que en las primeras décadas del siglo pasado, ¿quién no se rió alguna vez con el caballeroso Max Linder, o con las increíbles situaciones de un Pierre Etaix, o con las locuras de los hermanos Marx? Y ya mucho después, ¿quién no se divertió con los personajes de un Alberto Sordi, o con las imprevistas reacciones de Louis de Funes, o con los absurdos gags del grupo Monty Python? Si hemos visto filmes como "¿Dónde está el piloto?", "Loca Academia de pilotos", "Dónde está el policía?", la exquisita "Zelig" o toda la comedia italiana de los años 60 y 70. Si existen o existieron nombres como los de Pierre Richard, Mel Brooks, o como el genial Charles Chaplin, ¿quién va a negar que el cine cómico es el más popular entre todos los géneros cinematográficos? Y dentro de eso el humor negro…
-Tiene que estar buena, porque el negro es el duro ahí y el otro es el protagonista, ¿verdad, Berdulanga?
-Sí, Carla Isaura, pero cállense, vamos a verla.
-¡Cuidado, Carla Isaura! Berdulanga se va a comer el televisor... Bueno, les decía que mi película de humor negro va a ser un éxito. Incluso ya pensé en su título. No sé si llamarla: "Una cierta sonrisa" o "El mundo se mata de la risa", tengo duda. Pero les juro que ya leyendo los créditos iniciales, el público se dará cuenta de quiénes son los que trabajarán en la película…
-¿Viste eso, Berdulanga...?
-Sí, Carla Isaura. ¡Mira, mira...!
-¡Óigame, el negro ese es mejor que Bruce Lee!... Yo siempre me he preguntado si esas cosas son trucos de cámara. ¡Yo no puedo creer que un ser humano pueda dar esas volteretas en el aire, por encima del otro, caer parado, y al mismo tiempo soltarle una patada al tipo, así como si nada, ¿eh, Berdulanga?
-¡Si, Carla Isaura! ¡Pero, miren, miren, por dios..!
-Para ahorrar tiempo les haré una sinopsis de mi argumento: una persona llega a una casa de campo, tratando de guarecerse, y se encuentra que allí vive una pareja joven. Esa persona tiene el don de mostrarse mujer a los ojos de los hombres, y viceversa. Los dueños se enamoran de esa persona, y así comienza una larga cadena de enredos y situaciones, partiendo del consabido triángulo amoroso. ¡Eso nunca falla!...
-¡Pues mira, falló! ¡Increíble, pero el bueno falló! El malo ese parece durísimo también... ¿Eh? ¿Y eso es así? ¿Los malos pueden convertirse en cualquier persona? ¡Oye, pero matarlos va a ser imposible..! ¿Verdad, Berdulanga?
-¡Sí, Carla Isaura! ¡Pero dejen ver, por favor! ¡Miren eso..!
-Ustedes van a ver. Ahora toman preso al negro...
-¡Lo primero que te dije! ¡No cuentes la película, Buñuelo!
-Pero si no dije el final, Carla Isaura, no exageres ni sobreactúes. A propósito, quiero que protagonice mi película alguien salido del programa Saturday Night Live. No me gustan, ni los entiendo, pero nos asegura “comercialidad”. Es lamentable, es cierto, porque como casi todos los que se forman ahí sólo hacen reír a los norteamericanos y si uno se pone a observar detenidamente su rostro, enseguida se percata de que su secreto para la búsqueda de la comicidad consiste en ir, a su antojo, de la impasibilidad de Buster Keaton a la expresividad de Jerry Lewis o Jim Carrey. Profundizando un poco, también se da uno cuenta de su proposición como humorista, al ver determinadas escenas donde, tanto el texto como la forma de decirlo, nos llevan a recordar desde la locuacidad de un Cantinflas -en sus mejores momentos y no después de su muerte- hasta lo parco de un Jacques Tati. Como dato curioso, debo expresar que físicamente también me impresionan. Sus cuerpos de frente y, en algunas secuencias sus perfiles, nos dejan la duda de si estamos ante el flaco Stan Laurel o del gordo Oliver Hardy. Evidentemente, no me dan gracia ninguno, pero hay que pensar en el mercado americano, ¿me entienden?
-Yo no entiendo. ¿Ellos se ponen el aparato ese en la cabeza y van a la realidad de ahora? ¿Ellos viven en otra época?... Yo he visto muchas películas de ciencia ficción, pero ésta se las trae, ¿tú no crees, Berdulanga?
-¡Si, Carla Isaura! ¡Está fuerte la película!
-Todavía no sé cómo terminarla... ¡Ahora van a ver! Imitan algo así como una pelea final de películas de vaqueros!
-¡Cállate la boca, Buñuelo! ¡Ya sabemos que la viste!... ¡Óigame, pero ese tipo es un bárbaro! ¡Viste como se movió y esquivó la bala! ¿Tú viste eso, Berdulanga?
-¡Sí, Carla Isaura! ¡Pero para qué me invitaron si no me dejan ver esta cosa!
-Bueno, solo les puedo asegurar que mi comedia no tendrá, ni mucho menos, la ingeniosidad de una de Woody Allen, ni la ingenuidad de una de Max Sennet. No obstante, cumplirá su objetivo de satisfacer a los que disfrutan de las medias risas. Así lo demostrarán la mitad de los espectadores. El resto se divertirá de lo lindo.... ¿¡Eh?! ¿Qué pasó?
-¡¡Qué carajo pasó, Buñuelo!!
-No sé, Berdulanga. Parece que se fue la luz...
-¡¡Pero ahora en el mismísimo final!!... ¡Qué mala suerte, caballeros!...
-Bueno, Buñuelo,... ¿y? ¿En qué acabará la cosa?
-Mira, Carla Isaura... el muchacho es el elegido como se decía, mata a los malos y...
-¡No, Buñuelo! ¿En qué acabará tu película?
-¡Ah!... Bueno, quizás como toda buena comedia termina en "happy end": los dueños vuelven a amarse entre sí, y la persona se casa con ella misma. ¿Te gustó?
-A mí me gustó... ¡Y a ti, Berdulanga?
-A mí me encantó... Pero, con Bruce Willis hubiera sido mejor que con Keanu Reeves...
Cine qua non No. 5
Carla Isaura y Buñuelo en... "¡IDEA, CAMA Y ACCIÓN!"
-Carla Isaura...
-¿Qué pasa, Buñuelo?
-Nada. Es que se me ha ocurrido una idea fenomenal para un proyecto como para presentarlo en el Departamento de Cultura de la Municiaplidad.
-Creo que no es el momento, viejo. Eso puede esperar, terminemos con esto enseguida y ahí me lo cuentas todo, ¿sí?
-¡No, mujer! Te lo puedo ir contando mientras, es que si no se me olvida el proyecto y así también a ti se te pueden ocurren cosas para mejorarla.
Entonces si la redondeamos, la redacto hoy mismo.
-Está bien, pero tampoco es para desconcentrarse mucho en lo que hacemos, digo yo... ¿O quieres dejar de hacerlo?
-No, claro que no, mujer. Mira, para contarte mejor y verte bien la cara, cambiemos de posición.
-Dale… Guao, siempre me ha gustado más así... Bueno, ya, cuéntame esa famosa idea a ver si conseguimos algo de dinero, viejo.
-Dinero solo no. ¡Podemos entrar al fin en el mundo del cine!
-¡Dios te oiga! Pero cuenta, que ya me tienes nerviosa.
-Mira, la idea es la siguiente: se me ocurre organizar en este pueblo un Festival de Cine competitivo. Entonces lanzamos la convocatoria y comenzamos a recibir las obras con 2 ó 3 años de antelación, hasta tener en nuestro poder cientos de película.
-¿Tantas peli nos van a enviar?
-Claro, mujer, déjame seguir… y muévete tú un poco ahora para yo no hacerlo y así contarte mejor…
-Bueno.
-Sigo: entonces el sistema competitivo tendrá sus reglas y, para que la entiendas bien, las sintetizaré: en la primera semana del mes se verán todas las cintas que compiten, en lo que se conocerá como la etapa clasificatoria.
-¿Quién será el Jurado que tendrá que empujarse tantas pelis?
-¿Qué importa eso ahora, mujer? Mira, en esa etapa clasificatoria, se seleccionarán 56 películas que son, obviamente, las que pasarán a vigésimo octavos de final, y se vuelven a exhibir en la segunda semana ante el Jurado
-¿Pero quién se va a ser el Jurado …?
-¡Córtala, Carla Isaura!
-Es que me preocupa…
-¡No, que cortes lo que estás haciendo, porque te mueves demasiado, casi estás dando brincos! Así no puedo.
-No sé, Buñuelo, es que me parece que hacer esto y hablar de lo otro al mismo tiempo…
-Se puede. ¿Quieres cambiar de posición otra vez?
-No, así está bien.
-Bien… Te decía que el jurado escogerá entonces 28 para los décimocuartos de final, y se proyectarán de nuevo en la tercera semana. Para los últimos 7 días del mes se reservarán las mayores emociones, ya que se presentarán en pantalla, una vez más, las mejores 10 películas de la competencia. En ese momento se aplicará el sistema suizo de "todos contra todos, con una gran final cruzada, es decir, 1er. con 4to. y 2do. con 3er., y los ganadores entonces irán por el primer premio y los perdedores por el 3ero. Los puestos del 4to. al décimo se decidirá en una "rueda de consuelo". El gran premio será en metálico.
-No le pidas tanto dinero a la Municipalidad, porque enseguida te rechazan el proyecto.
-Por eso dije “en metálico”, porque consistirá en una estatuilla de bronce, o hierro, o lata que representará al Alcalde.
-¡Buenísima idea! ¿Me puedes tocar un poco por acá?
-Claro. ¿Con las dos manos?
-Obvio...
-Sigo entonces. Bueno, también implementaremos el premio de la popularidad.
-¡Guao!
-Buena idea, ¿no es cierto, Carla Isaura?
-Sí, pero dije “guao”, porque tienes las manos muy frías.
-Disculpa. Oye, y en el plano estrictamente económico, el Festival será todo un éxito, porque he pensado en ideas para un buen marketing y estrategias de ventas, por ejemplo: instalaremos grandes kioskos para la venta de productos relacionados con el cine, como carretes, DVD, butacas, linternas y pantallas de 35 mm.
-¡Qué bien...!
-Pero no cierres los ojos. Quiero ver bien tu reacción, porque no te he dicho lo mejor. ¿Sabes lo que se me ocurrió?: ¿organizar una venta-subasta de los mejores proyeccionistas jubilados que van quedando! Son reliquias vivas. ¡Patrimonio cultural vivo, Carla Isaura!
-Eso.
-Pero no te vayas...
-¡¿Qué?!
-Que no te vayas a pensar que todo será competencia. Durante el año que dure el Festival…
-¡Tanto va a durar!
-¿No estamos buscando conseguir dinero, Carla Isaura? Hay que alargar el asunto.
-Cómo esto, ¿no?
-¿Qué cosa?
-Nada. ¿Me das un buen beso ahora?
-Espérate. Se me ocurre que también podríamos realizar diferentes actividades culturales y recreativas, en forma paralela o "colaterales", como la llaman.
-Ñówsiqotk…
-¿Qué dijisite?
-Nada.
-Bueno, también podríamos organizar semanas de cine de cada país participante; muestras de cine didáctico, de aficionados, exposiciones de afiches y tickets de cine; adaptaciones de grandes películas para puestas en escena en el Teatro Principal, para puestas en radio en la emisora local; bailables populares con músicas com-puestas para cine…
-Eso.
-¡Qué lindo! ¿Verdad, Carla Isaura? Ya me imagino hasta desfiles de porteros y acomodadores luciendo uniformes típicos de todos los países participantes...
-¡Se acabó!
-¿Eh? Ni lo noté.
-¡No! ¡Que se acabó esta conversación aquí! ¡Concéntrate para que termines conmigo y después nos ponemos a redondear la dichosa idea esa. ¿De acuerdo?
-Bueno…
-Eso… Así… dale…
-… Te juro que este pueblo estará filme y seguros que tendremos un Festival "de película".
-¡¿Buñuelo?!
-¿Qué? ¿No te das cuenta? ¡Al fin, tú y yo metidos en el mundo del cine!... ¿Oye? ¿Por qué te vas? ¿Qué te pasó? ¡Carla Isaura! ¿Me vas a dejar así?... Di la verdad, no te gustó mi proyecto, ¿no es cierto?