Fábula del oso y el gallo
Introdúcese un enorme oso pardo de aplastante andar, con un canasta em su mano em la rústica tyenda de el gallo, un afable mercader, donde mézclase en aquest lugar la alpiste, la heno, la queso y los garrafas de miel, entre otros muchos productos esparcidos por los estantes deste surtido mercado.
De repente, el oso tómase de encima de la barra una pergamino que dícese: "Debed tener cuidado con el perro".
El plantígrado mírase a todas partes con el rabillo de sus dos ojos de él, sintióse la emoción de la peligro inminente, por lo que continúase caminando con sigilo, em puntillas de garras e y evitando tropezar con los estantes de abarrotes, a pesar de su volumen de él. Ansí, quien vase fasta el fondo de la local y al doblar a su derecha de él, de pronto encontróse con un diminuto, flaco y ridículo chihuahua, que comenzóse a ladrarle chillonamente una e otra vez.